Estamos familiarizados con la clásica forma de cocinar pasta, que implica hervir agua y luego cocinar la pasta elegida hasta que esté al punto. Pero, ¿qué pensarías si te dijera que existe un método económico para cocinar pasta sin necesidad de mantener la vitro encendida? Este método se llama «cocina pasiva» y tiene raíces antiguas. En este artículo, te enseñaremos todos los trucos para cocinar pasta sin hervirla por completo.
Cocción con calor residual
Ya en el siglo XVIII, Benjamin Thompson, uno de los fundadores de la termodinámica, observó que los alimentos se cocían no solo debido al agua hirviendo, sino porque se mantenían calientes durante un período prolongado. Esta observación condujo al desarrollo de la cocción pasiva, que permite cocinar pasta sin la necesidad de mantener el agua hirviendo constantemente. En esta antigua técnica, la clave es mantener el agua a una temperatura suficientemente alta para cocinar la pasta.
Cómo Practicar la Cocina Pasiva
Este método se aplica principalmente a la pasta seca, ya que lo que hacemos es rehidratarla. Para cocinar pasta con este enfoque, sigue estos pasos:
- Hierve agua en una olla.
- Agrega la pasta y espera un par de minutos hasta que el agua comience a hervir nuevamente.
- Apaga el fuego, cubre la olla con una tapa y sigue los tiempos de cocción indicados en el paquete.
- Deja que la pasta se cueza con el agua caliente.
Ten en cuenta que puede requerir algo de práctica y ajustes, ya que ocasionalmente la pasta podría quedar un poco cruda y necesitará más tiempo en el agua caliente.
Elección de la Pasta Adecuada
No todas las formas de pasta son igualmente adecuadas para la cocción sin fuego. Las formas con huecos, como rigatoni, tortiglioni, macarrones y mezze, son las más adecuadas, ya que permiten que el agua fluya hacia adentro y hacia afuera. Por otro lado, las pastas largas y finas, como espaguetis o linguini, no funcionan tan bien con este método.
Además, es importante seleccionar una pasta con tiempos de cocción razonables, no superiores a los 12 minutos, para garantizar que el agua permanezca lo suficientemente caliente durante el proceso de cocción.
Ventajas de Apagar el Fuego
Cocinar pasta sin fuego puede parecer paradójico, pero ofrece diversas ventajas. En primer lugar, ahorras en costos de gas o electricidad, según el tipo de cocina que uses. Además, al no estar atado a una llama encendida, puedes mover la olla y utilizar esa fuente de calor para otra preparación si es necesario. Por último, pero no menos importante, al cocinar la pasta de esta manera, se reduce la dispersión de almidón y gluten en el agua. ¿Has probado esta técnica? ¡Comparte tus experiencias en los comentarios!